Una muy buena metáfora para ver y pensar y una muy buena actuación de Truman, nuestra estrella.
Podríamos dedicar el tiempo en clase para hablar sobre los programas de cámara oculta, o a lo mejor sobre las personas que muestran su vida a las cámaras de una televisión fingiendo ser lo que no son. Incluso podríamos hablar sobre casas, islas o platós de televisión donde la gente convive 24 horas durante días y días y todos (o al menos algunos) observan sus alegrías, penas, discusiones o reconciliaciones... pero no hablaremos de nada de todo esto.
También podríamos dedicar tiempo a analizar algunos perfiles de Instagram y de otras redes sociales, donde algunas personas nos informan al minuto de sus últimas sensaciones, que aunque sean un poco falsas, a otros les parezcan de lo más maravillosas y por supuesto imitables, y como en el párrafo anterior, terminamos con la conclusión de que hoy no es el día para hablar del tema.
Hoy hablaremos de alguien muy especial. Del protagonista que sigue una audiencia planetaria y que alegra el día a millones de tele espectadores.
Nuestro protagonista se llama Truman, es decir, hombre verdadero y se apellida Burbank, un guiño a la ciudad californiana conocida como la capital mundial de los medios, pues algunas de las grandes compañías de entretenimiento televisivo tienen sus respectivas sedes y estudios en esta ciudad
Hablaremos por lo tanto con esta película de otras cuestiones, centrándonos en aspectos como la dignidad de la persona. Truman desde niño, está encerrado en un mundo artificial donde nada es real.
Podríamos dedicar el tiempo en clase para hablar sobre los programas de cámara oculta, o a lo mejor sobre las personas que muestran su vida a las cámaras de una televisión fingiendo ser lo que no son. Incluso podríamos hablar sobre casas, islas o platós de televisión donde la gente convive 24 horas durante días y días y todos (o al menos algunos) observan sus alegrías, penas, discusiones o reconciliaciones... pero no hablaremos de nada de todo esto.
También podríamos dedicar tiempo a analizar algunos perfiles de Instagram y de otras redes sociales, donde algunas personas nos informan al minuto de sus últimas sensaciones, que aunque sean un poco falsas, a otros les parezcan de lo más maravillosas y por supuesto imitables, y como en el párrafo anterior, terminamos con la conclusión de que hoy no es el día para hablar del tema.
Hoy hablaremos de alguien muy especial. Del protagonista que sigue una audiencia planetaria y que alegra el día a millones de tele espectadores.
Nuestro protagonista se llama Truman, es decir, hombre verdadero y se apellida Burbank, un guiño a la ciudad californiana conocida como la capital mundial de los medios, pues algunas de las grandes compañías de entretenimiento televisivo tienen sus respectivas sedes y estudios en esta ciudad
Hablaremos por lo tanto con esta película de otras cuestiones, centrándonos en aspectos como la dignidad de la persona. Truman desde niño, está encerrado en un mundo artificial donde nada es real.
-Tú eres real- le responderá en una escena el director del programa. Un mundo ideal, perfecto, cuadriculado, donde no existe el sufrimiento ni la tristeza, -el plano perfecto- la sonrisa perfecta, la pareja perfecta, los vecinos perfectos, el trabajo perfecto. Una ciudad sostenible, rodeada de naturaleza, playa, servicio de transporte urbano envidiable, ciudad limpia donde las haya... Vamos, que es el mejor lugar del mundo para vivir como dice la portada de uno de los periódicos que veremos en pantalla.
¿Quién no querría vivir en una ciudad así? Pero si es perfecta. Hasta que de repente te das cuenta de los peros de esta ciudad.
Comenzando por lo mas importante, su familia y amigos, o amigo podríamos afirmar.
No es su mujer de verdad, resulta que es una actriz. Su amigo del alma que desde la infancia no se separa de Truman, resulta que es un farsante, buno, un actor contratado para el papel de su vida y sus vecinos no son tan amables en la realidad, y en el trabajo ni te cuento
Hay un momento interesante en el que Truman será capaz de preguntarle a su supuesta esposa -¿Por qué quieres tener un hijo conmigo, si no me soportas?- ¿Crees que Truman ama a su esposa? O está también fingiendo sin ser un actor de la trama, esta es una cuestión que me parece interesante para analizar, Truman actuando en un mundo que no sabe que es ficción.
Truman no puede salir de la ciudad, por más que lo intenta, siempre hay algo que se lo impide, lo interesante es que nunca se rendirá, que es lo que haría la mayoría de las personas incluidos posiblemente nosotros.
Resulta que la vida de ensueño es una agradable fachada llena de actores (hipócritas) que le dicen a Truman, lo que el director del programa quiere que Truman oiga o vea.
Truman evidentemente también tiene obligaciones en su trabajo, debe pagar la hipoteca y según vamos viendo la película descubrimos que además tiene unas rutinas y unos programas de televisión favoritos un tanto curiosos. También observamos que algunos miedos que arrastra desde la infancia le impiden desarrollarse plenamente como persona y abandonar la isla en la que vive.
Poco a poco vamos viendo que se derrumba el castillo de naipes... el mundo de cuento de hadas tiene muchos peros, demasiados. Truman se irá gradualmente percatando de todo esto y llegará el momento en el que tendrá que apostar su vida en un juego muy peligroso, en el que por la audiencia, el programa será capaz de todo, y cuando decimos todo, estamos hablando evidentemente de hasta retransmitir su muerte por televisión.
Así que Truman, que parece que tiene una vida de éxito, en el fondo es un pobrecillo al que todos tienen engañado. El protagonista de una vida que no es la suya...
¿Quién no querría vivir en una ciudad así? Pero si es perfecta. Hasta que de repente te das cuenta de los peros de esta ciudad.
Comenzando por lo mas importante, su familia y amigos, o amigo podríamos afirmar.
No es su mujer de verdad, resulta que es una actriz. Su amigo del alma que desde la infancia no se separa de Truman, resulta que es un farsante, buno, un actor contratado para el papel de su vida y sus vecinos no son tan amables en la realidad, y en el trabajo ni te cuento
Hay un momento interesante en el que Truman será capaz de preguntarle a su supuesta esposa -¿Por qué quieres tener un hijo conmigo, si no me soportas?- ¿Crees que Truman ama a su esposa? O está también fingiendo sin ser un actor de la trama, esta es una cuestión que me parece interesante para analizar, Truman actuando en un mundo que no sabe que es ficción.
Truman no puede salir de la ciudad, por más que lo intenta, siempre hay algo que se lo impide, lo interesante es que nunca se rendirá, que es lo que haría la mayoría de las personas incluidos posiblemente nosotros.
Resulta que la vida de ensueño es una agradable fachada llena de actores (hipócritas) que le dicen a Truman, lo que el director del programa quiere que Truman oiga o vea.
Truman evidentemente también tiene obligaciones en su trabajo, debe pagar la hipoteca y según vamos viendo la película descubrimos que además tiene unas rutinas y unos programas de televisión favoritos un tanto curiosos. También observamos que algunos miedos que arrastra desde la infancia le impiden desarrollarse plenamente como persona y abandonar la isla en la que vive.
Poco a poco vamos viendo que se derrumba el castillo de naipes... el mundo de cuento de hadas tiene muchos peros, demasiados. Truman se irá gradualmente percatando de todo esto y llegará el momento en el que tendrá que apostar su vida en un juego muy peligroso, en el que por la audiencia, el programa será capaz de todo, y cuando decimos todo, estamos hablando evidentemente de hasta retransmitir su muerte por televisión.
Así que Truman, que parece que tiene una vida de éxito, en el fondo es un pobrecillo al que todos tienen engañado. El protagonista de una vida que no es la suya...
Parece que todo vale para entretener en el mundo de la televisión, sobre todo si la publicidad nos reporta unos jugosos beneficios -todo está en venta, desde los vestuarios de los actores, hasta lo que comen e incluso sus casas-
Hay muchas frases que dan para pensar y numerosos momentos donde se nos ofrecen pistas. Nosotros como Truman (Jim Carrey) vamos descubriendo que algo no encaja en la casi perfecta vida, detalles que hacen que sospechemos desde el principio que algo no encaja y que -todo el mundo está en el ajo-
No nos perdamos el final (en ninguna película claro) y no únicamente los momentos donde el público sufre, llora y se alegra junto con el protagonista. Hay que viajar en la "Santa María" con Truman para descubrir el paraíso, la libertad, esa tierra soñada donde todo puede suceder. Arriesgarse para conseguir vivir, La vida es un viaje, donde tempestades, tormentas y luchas nos harán caer, pero también nos harán fuertes, y al final se abrirá ante nosotros la puerta, con el fondo negro. ¿La cruzamos o nos quedamos en la vida fácil y cómoda que nos propone Cristof (Ed Harris)?
- ¿Te parece que lo que le sucede a Truman puede suceder en la realidad? ¿No hay ya algo de esto en todo lo que vemos por TV
- ¿Qué pasa con la Libertad de Truman? ¿Es lícito hacer lo que se hace con Truman? ¿Se cumplen los Derechos Humanos?
- ¿Qué pasaía si Truman sale de la ciudad en la que vive?
- ¿Qué opinión te merece la mujer de Truman? Defínela y explica sus características más importantes.
- ¿Cómo es la madre de Truman? Se comporta como te imaginas que debe comportarse una madre.
- ¿Qué te parece el amigo de Truman? Si te pasara lo mismo, ¿Qué harías?
- Reflexiona sobre Cristof. ¿Cómo es, qué quiere, cómo lo hace…?
- ¿Sabes lo que significan los nombres del protagonista y del creador del programa de televisión? Investiga un poco...
- ¿Qué tiene que hacer Truman para huir de la ciudad? ¿Hasta dónde es capaz de llegar? ¿Hubieras abierto la puerta como hizo Truman? ¿Te hubieras arriesgado a navegar?
- –Que ponen ahora- No lo sé –Miraré en la Teleguía. ¿Qué te sugiere esta frase?
- ¿Es cierto que los medios de comunicación nos pueden infundir temores sobre personas o países? ¿Sobre determinados colectivos? ¿Todo lo que vemos en televisión es cierto? ¿Qué manera tenemos para verificar que lo que vemos en televisión o consultamos en internet es real? ¿Puedes poner ejemplos sobre estos asuntos?
- ¿Crees que la publicidad y los programas de televisión nos presentan mundos maravillosos, perfectos y que en realidad no lo son?
- ¿Cual es el sentido de la vida según el guión que Cristof tiene preparado para Truman?
- La reaparición del padre de Truman es sublime, música, niebla, abrazos... el mundo de la televisión hace posible lo imposible. Piensa en este momento y en todos los momentos sublimes que nos presenta la televisión e internet y escríbelos. Parece que a Trumán este momento no le ha convencido y será uno de los desencadenantes para que descubra la verdad.
- Comenta otras cuestiones que te parezcan interesantes, al hilo de lo que hemos hablado en clase.